Las ampollas son la peor pesadilla de los deportistas. Todo el mundo piensa tener una fórmula de cómo evitar las ampollas, pero hasta ahora nadie lo ha conseguido al 100%. Una ampolla implica una molestia enorme a la hora de dar un paso, imagínate si hablamos de largas distancias. Suelen aparecer en las zonas con más fricción, como en la parte posterior de los talones, el arco del pie y los dedos. La aparición de ampollas es una de las lesiones más comunes entre los deportistas, por eso, a continuación, hablaremos sobre cómo se forman, cómo se evitan y, en caso de no poder evitarlas, cómo se curan.
Las ampollas se forman a lo largo de grandes caminatas, varias horas de entrenamiento, o simplemente porque no hemos elegido bien la combinación zapatilla – calcetín. La causa principal de la aparición de estas heridas es el roce que provoca un mal calcetín con nuestro calzado. Se trata de costuras duras o arrugas que se dan por un mal tallaje de los calcetines. Por tanto, su formación se da debido a una rozadura, donde se acumula un fluido bajo esta zona de piel dañada, que acaba formando la ampolla. Algunas veces, si la herida es profunda, se puede dar el caso de que estas ampollas sean de sangre, en este segundo caso, el dolor es mucho más intenso y nos hará detener de nuestra práctica deportiva. Lo más importante es saber dónde está el problema y ponerle solución de inmediato.
Por lo tanto, ¿qué debemos hacer para evitar las ampollas? El secreto está en los calcetines. Lo suyo, es usar unos calcetines que contengan protección en los empeines, refuerzos en los talones, acolchados en las zonas propensas a los callos, y elásticos para no cortar la circulación. Además, es importantísimo que el calcetín se mantenga seco, por tanto, ¡olvídate del algodón! Aquí encontrarás los mejores calcetines antiampollas.
Hablamos pues, de tres campos en los que debemos actuar para prevenir la aparición de ampollas.
- El primero de ellos, son las zapatillas, al igual que los calcetines, es muy importante que sean del número que necesitas, ya que, en caso contrario, el pie sufrirá incomodidad todo el tiempo. Si usas plantillas, comprueba que se encuentren en buen estado.
- El segundo campo son los calcetines. Es una de las prendas más olvidadas, aunque se trate de una de las más importantes. Son los encargados de proteger la piel de la bamba y de gestionar la evacuación del sudor que genera el pie. Las fibras sintéticas evacuan mucho mejor la humedad y el sudor que las fibras naturales, como la lana o el algodón. El exceso de humedad en el pie es uno de los factores principales para la aparición de ampollas. Existe una alternativa para reducir la fricción, el uso del doble calcetín, siempre que el que está en contacto con la piel quede bien ajustado. Aun así, los calcetines de alta gama ya incorporan sistemas antiampollas (doble capa o bandas de sujeción). Y para las ampollas que aparecen entre los dedos, una buena solución es el uso de calcetines con compartimentos específicos para cada dedo.
- El tercer y último campo es la piel. A medida que la piel se adapta y sufre continuas fricciones, la capa más externa se vuelve cada vez más gruesa, se protege de manera natural contra las ampollas. También es recomendable preparar la piel con productos como los antitranspirantes, lubricantes o vendajes.
Aun así, por muchas medidas preventivas que tomemos, las ampollas pueden aparecer de todos modos, y debemos saber cómo curarlas. Es una buena alternativa dejar que naturalmente se revienten o se reabsorban. Aún así, en caso de tener mucha molestia, se puede hacer un agujero muy pequeño, el tamaño de una aguja o alfiler es suficiente, para drenar el líquido. Es necesario también, saber aquello que no debemos hacer con una ampolla. Lo primero es explotarla apretando bruscamente con los dedos, y lo segundo es arrancar los restos de piel muerta que quedan alrededor de la herida.
En resumen, las ampollas parecen un problema secundario en la vida del deportista, debido a su tamaño. Pero la verdad es que se trata de una de las lesiones más comunes entre corredores, y pueden hacer que abandonemos la práctica del deporte, ya que generan unas molestias enormes. La ropa y los complementos para hacer deporte son un tema muy importante, porque pueden ayudarnos a evitar muchas molestias y lesiones. A la hora de hacer deporte, lo más importante es ir cómodo, y a partir de ahí, el resto viene solo.
¿ Y tú, has tenido alguna vez ampollas?